miércoles, 23 de septiembre de 2015

Ave silenciosa

En tus manos hallé mi refugio, en tus manos me he confiado cual pequeña ave silenciosa dispuesta a morir sin nunca haber llegado a lo alto de tu cuello. No hay vida después de la muerte pero lo que mas duele es que no hay besos tuyos en paraísos e infiernos...
Era yo picando el cristal de tu ventana esas mañanas de lluvia y frío esperando por tu compasión que nunca llego...
Era yo con una flor fresca para ti...
Era tan gris y me apagaba en la claridad, me empapaba pero eso no importaba...
Un sueño cálido del que quería formar parte...
Una soledad tan grande, enorme, tan desesperante...
Aunque el viento me estampase contra el cristal, aunque la lluvia me fuera a ahogar yo seguiría acá soñando un lugar a tu lado, soñando ser real e ideal en tus sueños, soñando ser una realidad no muy lejana a la que, tal vez, quisieras atrapar...

martes, 15 de septiembre de 2015

A la orilla del lago

Tan sorprendido vio su reflejo en el lago, creyendo que solo era una ilusión, creyendo ser parte de ese ultimo grupo de gotas que cayeron de las nubes. No vio mas que un ser marchito cual rosa roja en agonía. No vio mas que un ave con alas cortadas en lo alto del árbol. No vio mas...
El palpitar de emociones ajenas no producía mas que rechazo. -Ver a unos ojos y no hallar nada es ver al mar por el atardecer-.
No hay nada que reconstruya su figura espiritual, su figura reluciente de animación, su original alborozo primaveral...
Hoy, a la orilla del lago observa a un alma en pena y no quiere obsequiarle mas que paz eterna.